1- En el primer semestre de la 'nueva' Mediaset España solo ha habido dos cambios sustanciales respecto al vasilismo que queda atrás: Alessandro Salem ha relevado a 'Sálvame' para dejar hueco a 'TardeAR' y se ha levantado el veto que en el grupo editor de Telecinco se le había impuesto a Banijay, participada por De Agostini.
2- Óscar Cornejo está que se sube por las paredes: Código ético, filtración del final de 'Sálvame' a El Mundo, que tituló "el fin a la telebasura", y promesas por parte de Mediaset de que no habría ERE, que ya está en el horno.
La maquinaria engrasada de La Fábrica de la Tele lleva dos décadas derrochando talento y no se van a quedar en Fuencarral para hacer 'Socialité', 'Focus', 'Todo es mentira' y un reality para Netflix. Ellos no son Mandarina. ¿Se avecina divorcio con Mediaset? Tiempo al tiempo.
3- Vasile trina desde Roma: cree que es un error cancelar 'Sálvame' para emitir un subproducto como 'Así es la vida', tertulianos a 300 euros mientras en 'Y ahora Sonsoles' atan los perros con longanizas. El directivo también piensa que Banijay está colando mucho producto amortizado por la industria: '¡Allá tú!', 'Me resbala' o una imitación tardía de 'Crónicas Marcianas'.
4- Salem dice que sigue confiando en La Fábrica de la Tele, arrinconada tras perder el 60% de su factura, que redundará en favor de Unicorn Content y Banijay. Salem ha comprometido demasiada inversión y justifica que se ha visto obligado a encamarse con Banijay, con los que tenían que negociar la vuelta de 'GH VIP' y 'Supervivientes', que podía pasar a Atresmedia.
5- Sandra Fernández utiliza su agenda ayusista para comer con los editores más carcas de Madrid. ¿Su objetivo? Que la extrema derecha digital perdone a Mediaset el "rojos y maricones" de Jorge Javier Vázquez, hoy KO, y sobre todo, del serial feminista de Rocío Carrasco.
6- Los cambios en deportes han sido consensuados con JJ Santos, los informativos se desperezan con entrevistas electorales y un especial coronado por el rasputín Narciso Michavila y, previsiblemente, habrá cambios en 'Informativos Telecinco' para modernizarlos sin que este hecho vaya a redundar en mejora de audiencias, ya que en España el seguimiento de los anodinos noticieros depende del telonero, no del Vicente Vallés de turno.
7- Pese al ruido en Mediaset, en Milán reina la tranquilidad: el grupo televisivo lidera la rentabilidad pese al suelo que tocan Telecinco, que en junio cayó hasta el 11% de share (lo que supone 5,8 puntos menos que en 2021) y Cuatro. Los beneficios son suficientes para que Alessandro Salem disponga de tiempo para tantear contenidos más blancos antes de que 'GH VIP' y 'TardeAR' dictaminen en septiembre el estado de Telecinco.
El CEO italiano, por ahora, parece más preocupado por el célebre zascandil Borja Prado, entre el palco del Bernabéu, las cenas con el facherío y el despacho de faraón que se hizo construir cuando presumía de tener atribuidas unas competencias de las que carecía.
8- En Atresmedia parecen acostumbrarse a ganar tras treinta años de derrotas. 'El hormiguero' o 'Pasapalabra' son difíciles de batir. Es por ello que la nueva Prisa andan pendientes de la guerra de los debates, los nuevos tiempos políticos (José Creuheras acompañó a Alberto Núñez Feijóo en Atresmedia y no lo hizo con Pedro Sánchez, que toreó a un desatinado Carlos Alsina), y de birlar el talento rosa a Telecinco, la próxima podría ser Gema López si no hay contraoferta de AR.
9- 'Y ahora Sonsoles' alcanza el 13% con dificultad pese al hueco de 'Sálvame', que hacía la misma audiencia sin tanta petulancia. La Ónega, con su magazine noventero, se va a merendar a 'Amar es para siempre' y las otomanas. Veremos si puede con su exjefa, que con total seguridad plantará batalla.
10- Desbandada histérica en RTVE ante el cambio de ciclo que se avecina: Elena Sánchez ha frenado la destitución del jefe de Deportes Arsenio Cañada, responsable de que su mano derecha Javier Grima diese espacio gratis a El Ganso durante el Mundial de Qatar.
Y José Pablo López, que huele nuevos tiempos, le ha metido un gol al PSOE al entregarle las mañanas a una productora pepera ligada a la desatinada Sigma Dos, La Cometa TV, que nunca ha producido un espacio de este nivel.
Eso sí, el programa previsiblemente será competitivo gracias a la eficacia del directivo que lo tutelará, Eduardo Blanco, especialista en magazines e instalado en Gran Vía tras regresar de Canarias después haber trabajado para la productora má polémicas de las islas,
El dueño de La Cometa TV, Gerardo Iracheta, más del PP que Manuel Fraga y muy amigo de MAR, no ha esperado al triunfo de Alberto Núñez Feijóo para hacer caja en RTVE.
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