Sobre Bertín Osborne, dictaduras y derechos fundamentales





Bertín Osborne, que debe compartir asesor de imagen con Arcadi Espada, sigue erre que erre y asegura que a las mujeres españolas no les falta ni uno de los derechos fundamentales porque incluso "juegan al fútbol". 

El rey de la ranchera ha invitado a las feministas a acudir a la puerta de la Embajada de Irán, "donde lapidan a las mujeres" o a ir a la puerta de la Embajada de "Afganistán o Nigeria". La estrella de Mediaset asegura que las mujeres en nuestro país "tienen los mismos derechos que nosotros. Lo que pasa es que eso no es progresista, no es de izquierdas. Mamarrachos".


Hablando de mamarrachos, de dictaduras y de derechos fundamentales: en 1975, cuando Bertín era un niño de papá de 21 años, en España no se aseguraban los derechos fundamentales de las mujeres, tratadas como comparsa a la que le tenían que firmar hasta para abrir una cartilla del banco. 

El bueno de Bertín, que invita a manifestarse contra las dictaduras, por supuesto que no movía un solo dedo por la igualdad, ni por los derechos fundamentales de las mujeres, ni mucho menos porque cayese la dictadura. 

Suárez Illana, hijo del secretario general del Movimiento, le recordó en una entrevista que coincidió con él en la Universidad y que el bueno de Bertín era "muy facha". El hombretón se lo tomó a risa, quizás obviando que no defendió ni la democracia. Ni a las mujeres. Ni a los derechos fundamentales. 

¿Por amor ciego a España? Parece que tampoco: Bertín ha tenido que pagar millonarias sanciones a Hacienda por evasión de impuestos. Es decir, que podríamos pensar que la estrella de Telecinco solo se acuerda de las dictaduras para linchar al feminismo, que tanto le molesta. El cantante podría invertir el mismo tiempo en arremeter contra los partidos machistas que trivializan sobre la violencia de género, lacra que en la última década ha costado más de 700 vidas en España. 

1 comentario:

  1. Estando de acuerdo contigo en muchas reflexiones y que Bertín mea muchas veces fuera del tiesto, lo que afirma, tal cual es verdad, es decir, en la legalidad española no existe discriminación hacia la mujer...otra cosa es el día a día a pie de calle, pero en efecto, normativamente no hay pero.

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