Iván Redondo ganó





Ganó Iván Redondo: la utilización del Rasputín vasco de la derecha desinhibida, Vox, le funcionó al PSOE, que se disparó, ganó en todos los feudos conservadores y consiguió un resultado excepcional que sitúa a Pedro Sánchez en una plácida posición con varias opciones para gobernar. 

La ciudadanía frenó a 'la España de Colón' con un severo tortazo: la derecha pierde más de un millón de votos, Ciudadanos estuvo a punto de sorpassar a Casado, Unidas Podemos salvó el match-ball y Santiago Abascal, señuelo de La Moncloa, tuvo un resultado muy decepcionante pese a la euforia que mostró la ultraderecha en la campaña electoral.

En definitiva, que Iván Redondo, antiguo asesor de García Albiol, Monago y Basagoiti, durmió ayer entre confeti. El PSOE, desgastado por la corrupción y la hipocresía (retórica izquierdista, programa liberal), ha resucitado con fuerza. El bloque monárquico se asienta y la derecha seguirá lejos del poder. No es poco, pero tampoco mucho.

La socialdemocracia ha creado un estado de ánimo que ha provocado que miles de españoles monten una especie de muro anti-Vox que ha resultado con claro éxito para el PSOE, organizador de un teatrillo que ha provocado que la ultraderecha regrese al Parlamento y que haya existido un cierto espíritu de dignidad ante la involución que ha llegado, más tímida de lo previsto, para quedarse.

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