Jordi Évole volvió ayer a mirar a la política nacional tras varios meses de descanso y analizó el fenómeno VOX tras su éxito en las andaluzas. La formación ultraconservadora que lidera el aguirrista egipcio Santiago Abascal ha puesto su foco en los musulmanes, escondiendo que esta patria la saquearon los cristianos.
La formación ha emprendido una guerra mediática trumpista contra La Sexta y ha fabricado un discurso plagado de mentiras sobre inmigrantes pobres, mujeres maltratadas y Regímenes fascistas. También han hecho defensa de la España rural, olvidada por los partidos desde hace décadas, aunque lo hacen enarbolando la bandera de sus tradiciones más cerriles.
'Salvados' se coló en los mitines de VOX para sortear el veto de Abascal e invitó a Carlos Herrera, que se retrató: hace diez días zancadilleaba al líder ultraderechista, síntoma del miedo de Génova ante su locuaz escisión, y ahora se dedica a blanquear a esta basura para amortiguar que al PP se le vean las costuras en su posible pacto con la extrema derecha outsider.
Herrera, entre el PP estatal y el PSOE andaluz
Herrera, que le debe el fichaje por COPE y TVE al PP, ayer blanqueó el mensaje de VOX, normalizó su programa político, pidió sosiego en el análisis, y quitó hierro a Abascal, profetizando erróneamente que no engordará electoralmente más.
La estrella de COPE no quería molestar a VOX y acabó cabreando a sus parroquianos matinales, que se rebelaron en Twitter. Y es que Herrera, capaz de enchufar a su mujer en Canal Sur o ser la imagen del cortijo audiovisual cuando cumplió veinticinco años, dice que el PP no debe "mancharse las manos" con VOX y pactar con él.
A Herrera quedó retratado con la hemeroteca: Évole le echó en cara lo que le dijo a Podemos en el pasado y éste se reafirmó, diciendo que el partido que lidera Iglesias ejecuta "un matonismo guerracivilista" y que dirá lo mismo de VOX cuando Abascal se pase de la raya. Ya. También señaló que es un "poquito cansado" que se hagan votaciones sobre Franco, síntoma de sus complejos.
El torero radiofónico remató el guiso, se supone con ironía, diciendo que votó al PCPE, "que son enternecedores". Como él cuando le toca mudar el discurso al alimón con los argumentarios que vomita Génova 13 ante sus ex enemigos y hoy aliados.
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