Los responsables de TVE en esta lamentable etapa "pepera" son unos genios; tienen hundidas las mañanas-incapaces de despedir a la taurina Mariló-, tienen hundidas las tardes-tras dejar escapar Amar en tiempos revueltos-, tienen hundidos los informativos-tras cargarse la etapa más plural de su historia- y se han cargado RNE-con unas listas negras evidentes-.
Los evidentes problemas de audiencia son tomados sin ningún talento, con algún famoso plagio andaluz-o el retorno de España Directo, al que azotaron en la oposición- y maltratando a las series- con La República "secuestrada" y otras "en la nevera" o con su viabilidad y futuro en peligro-.
Ahora para rematar el disparate han decidido cargarse la imprescindible noche de los sábados, que representa lo que tiene que tener una cadena pública; Informe Semanal y cine español.
A Informe Semanal lo han relegado a las doce de la noche, su peor horario en cuarenta años y el primer cambio horario, exceptuando un breve periodo en el 93. Todo ello para estrenar Uno de los nuestros, reality musical con unos elevados costes que dificilmente se podrán "amortizar" en la noche con menos seguimiento de la semana-aunque TVE no tenga publicidad sí tiene público- .
Esto ha servido también para eliminar Somos cine, única ventana de cine español reciente en La 1. Esto viene apenas una semana después de ver a Ignacio Corrales chulear sobre la fuerza del cine español en TVE, con una fuerte inversión y una promoción a través de las películas emitidas.
El que quiera ver cine español en La 1 se tendrá que conformar con la caspa de Cine de barrio. Mientras que el que quiera Hollywood lo podrá disfrutar en La 1 cualquier día. Es penoso que un canal público gaste millones en emitir este tipo de cine, mientras margina el nuestro propio, que es parte indispensable de nuestra cultura. Hace poco esta TVE hizo una estrategia parecida, al cargarse Los clásicos de La 1, que nos hacían disfrutar con los clásicos yankees.
Jenaro Castro, hombre del PP en los años de oposición a ZP en RTVE y fallido aspirante a jefe de informativos, ha admitido que no está contento con el cambio, por mucho que TVE diga que pasa al "segundo prime-time". A Jenaro lo que tendrían que hacer es despedirlo al frente de un programa mítico.
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