El locutor turolense Federico Jiménez Losantos ha decidido retirar la demanda contra El País, que fue formalizada tras la publicación de los papeles de Bárcenas, donde la empresa Libertad Digital era apuntada como presunta beneficiaria de la corrupta trama con una ayuda en la ampliación de capital de 2004.
El eterno díscolo de todo, azotador infatigable de la izquierda y niño malo de la derecha, ha tomado esta decisión porque "a la vista de las diligencias del juzgado y del reconocimiento del propio Bárcenas, existen dudas de hecho y de derecho que hacen aconsejable la renuncia a la acción”.
Los pagos irregulares fueron de 36.000 euros como publicó El País. En septiembre de 2004 un PP en estado de shock tras la inesperada derrota post-11 M ayudaba desde sus "cloacas" a un panfleto digital apadrinado por un locutor, que ganaba enteros en esa época por tirar de la derecha hasta posiciones extremas con algunas paranoias del atentado de Madrid que eran lanzadas por su eterno colega Pedro J. Ramírez desde las páginas de El Mundo.
El locutor se convirtió en el gran mesías del centro-derecha con la connivencia del obispado español, que utilizó los micrófonos de COPE para crear un grupo cuya matriz era el periódico digital. Los favores de Esperanza Aguirre hacia Libertad Digital fueron ( y son) muy evidentes; grandes dosis de publicidad institucional, licencias de televisión y radio y favores públicos en defensa de su persona-incluso delante del Rey en un almuerzo con ZP como testigo-.
En los últimos años Federico se refugió en su grupo tras su salida de COPE y ahora como denunciador durante dos décadas de corrupción socialista se queda "en pelotas" ante su rebaño liberal con esta acusación que misteriosamente se queda sin demanda.
El "martillo de herejes", otro "liberal" subvencionado con dinero de todos, es un vivo ejemplo de lo que son los "libegales" patrios: son tan inútiles en la gestión de lo privado que sólo saben vivir de lo público. Este sujeto, en concreto, nos debe a todos tres millones de euros no pagados a Hacienda así como una cantidad incierta procedente de los dineros trasvasados generosamente a sus fallidos proyectos desde las arcas de lo público (lo de todos) por "Luis, el cabrón". Este sujeto, asimismo, nos debe el dinero de la venta de las licencias de TDT que vendió antes de verano, pues NO LE PERTENECEN, por ser una concesión del espacio radioeléctrico... pero la Comunidad de EsPPeranza Aguirre calla y otorga.
ResponderEliminarAlguien se me quejaba de que "el Fede" ya no es el mismo. Claro, le respondí. Es que ahora las querellas y condenas las paga de su bien saneado bolsillo, y no como en la era COPE cuando todos pagábamos con cargo al "impuesto revolucionario" que supone los 11.000 millones de euros anuales que nos quita la secta católica.
¡Ah, esos "liberales a la egipcia"! Cuánta razón tenía Quevedo cuando escribía que "entre el honor y el dinero, lo segundo es lo primero"...