Al calor del éxito del agitador Beppe Grillo con su Movimiento 5 estrellas -54 senadores, 108 diputados y el 25,5% de los votos- muchos están animando a repetir el experimento en nuestro país. El colapso del sistema italiano y el hartazgo de los ciudadanos con los viejos partidos -y los viejos verdes como Berlusconi- han propiciado que un humorista irreverente haya zambullido su proyecto en el Parlamento romano simplemente con el método de meter el dedo en el ojo del poder.
Este ácido artista ha sabido captar el descontento general de la sociedad tras años y años de denuncias a través de su blog y de sus shows cómicos en teatros-era su refugio tras ser vetado por la RAI y el conglomerado Mediaset-.
En España algunos descerebrados andan alentando vía Twitter a Andreu Buenafuente a intentar repetir la aventura política y encauzar electoralmente al movimiento 15-M.
Ni tiene preparación para ello ni nunca ha dado muestras en toda su vida de compromiso social o inquietudes políticas, más allás del chiste facilón.
La pasada semana en El País lo incluyeron en un reportaje sobre futuros políticos que podrían repetir la vía Grillo. Los chicos de Cebrián no creen en Rubalcaba y quieren darle el cambiazo con cualquiera -menos con Chacón que es groupie de Roures-.
Incluso esta semana el propio humorista escribe en la tercera de Interviú sobre el tema-que decadencia y que bajón del semanario de Zeta pasar de los sonetos de Sabina a las chorradas ombliguistas del de Reus-.
"He pensado en el tema, pero creo que no serviría". Cada cual debe saber sus limitaciones y eso es una virtud. Pero el no lo hace solo por eso, lo hace porque sabe que si se sale del sistema se le acaba el chollo.
Andreu se crió televisivamente a los pechos de Pujol, siendo sin duda la niña bonita del nacionalismo catalán en ese órgano de propaganda llamado TV3 -solo el tripartito fue capaz de hacer "sangre" y denuncia rollo Vaya Semanita con Polonia-.
Luego cuando el Pujolismo se cayó con su corrupto padre Andreu abrazó el socialismo catalanista ambiguo -con grandes contratos en TVE y TV3-.
Entrevistador pelota de chiste facilón, Andreu es un funcionario del humor y flojo importador de los late-shows yankees. Buenafuente ha sido incapaz con sus programas de innovar mínimamente en su programa para evitar hundirse con su pesado tonelaje.
Hace años el cómico entró como un soplo de aire fresco en las medianoches españolas donde olía a lupanar con Sardá de maestro de ceremonias de grotescos circos donde se mostraba a la mujer barbuda y al bombero torero y había peleas de barro de analfabetos y cocainomanos.
Antena 3 lo cuidó al principio -bien promocionado y sin cortes publicitarios- pero cuando Sardá se prejubiló Andreu fue incapaz de heredar el reinado de las noches españolas.
Al final la cadena lo obligó a salir por la puerta de atrás hacia la Sexta donde era accionista fundacional, en una de esas operaciones contra el sentido común de Contreras -como la compra de la Formula 1 y el fútbol para hacerle un favor a Roures que lastraba sus presupuestos-.
Y la pequeña cadena era incapaz de generar los ingresos publicitarios capaces de pagar su sueldazo anual -6 millones de euros anuales- y todo su enorme equipo -más de 100 personas-.
En su retorno a Antena 3 en prime-time con Buenas noches y Buenafuente fue incapaz de ofrecer algo minimamente original y si no lo veían a la 1 de la mañana contra subproductos, menos lo iban a ver contra Aída y la ración semanal de Hollywood de La 1.
Andreu sería incapaz de jugarse su fortuna por unos ideales -si es que los tiene- y nunca se mueve un centímetro de lo políticamente correcto -lo más atrevido que ha hecho es rechazar un premio porque también se lo daban a Jiménez Losantos, demonio apestado oficial de la izquierda en ese momento-.
El único producto digno que ha parido su factoría -entre fechoría y fechoría- ha sido Salvados, que mientras denuncia la precariedad laboral ofrecía trabajo de redactor-guionista sin remuneración -por la cara vamos-.
En el sector Andreu es famoso por sus pelotazos de programas cutres muy caros con la etiqueta humor inteligente. Es número uno en vender bolas como nadie.
Paolo Vasile ni le coje el teléfono. Para Mediaset lo único que ha producido ha sido basura; Palomitas, Las noticias de las dos, Réplica o Plan C...
Y en TVE ni hablamos; en la etapa socialista trincaba a manos llenas gracias a que el director de la cadena -Javier Pons- había sido director en El Terrat.
El gran pelotazo lo dio con la serie Pelotas; una serie que había rechazado Antena 3 y que pese a los discretos resultados de audiencia de la primera temporada fue renovada por más dinero para otra tanda de capítulos.
Facturó gracias a la ficción 16 millones de euros en menos de dos años y la noticia más llamativa fue que RTVE le perdonó 1 millón de euros a El Terrat por la reducción del metraje en esta serie low cost cobrada a precio de oro, con unos guiones flojos y una factura técnica de película indie.
No fue el único engendro de Andreu para RTVE; Por fin has llegado, La guerra de los mandos, Gafapastas-6.000 € diarios y no llegaba al 1% en La 2- o el timo del Chikilicuatre, donde la productora catalana se embolsó una millonada con el merchandising gracias a la publicidad gratuita de "la televisión de todos". De unos más que de otros, sobre todo en la etapa socialista donde a las productoras que pusieron pasta para el nacimiento de la Sexta se las trataba muy bien con los contratos.
Para Lara parece que Andreu no entra en sus planes con otra colección de fracasos; Mundo oficina, Piso Compartido, Vuelta y vuelta, El programa de Berto, Ticket o A pelo para la Sexta y Buenas noches y Buenafuente, Peta Zetas, Divinos y El armario de Josie para Antena 3.
Ahora El Terrat vive de El Follonero y de las tardes de TV3 con sus amigos nacionalistas. Mientras negocia a duras penas con MTV-expertos en ajustar presupuestos- la tercera temporada de Alaska y Mario.
La compañía no anda por buenos momentos con solo dos programas en antena y se ha visto forzada ha acometer un ERE para 28 trabajadores.
Para levantar las cuentas ahora se dedican a la BBC; bodas, bautizos y comuniones.
Que si un anuncio de Skoda con Leopoldo Abadía, que si un videoclip con el grupo Supersubmarina, que si algunas cosas en teatro barato barato con monólogos de Santiago Segura, Goyo Jiménez o Alberto San Juan-parece que ya no creen en el "humor catalán"- o una película low cost a punto de estrenarse.
Hace poco se publicó que Buenafuente paseaba por los estudios de Telecinco para negociar un posible nuevo proyecto. ¿Mira quién salta o Mira quién baila?-.
Después de tantos años con el chistecito elitista de la telebasura de Telecinco y ahora se la tiene que envainar. Aunque Corbacho insultaba más a la cadena amiga y ha conseguido un contrato de larga duración para tomar el sol. Que lo pase bien lo mejor de la progresía catalana aceptada por la burguesía Pujolista y una última cosa; si Gil fue alcalde, Ruiz-Mateos eurodiputado y Belén Esteban según sondeos podía llevarse el 10% del voto patrio, Andreu también puede aunque seguramente intentará levantar su empresa y aprender a cambiar pañales. Al final Buenafuente ha tenido un niño con La niña de Shrek-la maravillosa Silvia Abril- . La bella y la bestia.
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