José Manuel Villarejo aseguró hace unos días en sede judicial que Juan Muñoz, empresario y marido de Ana Rosa Quintana, habría intentado conseguir un vídeo en el que un exjuez aparece esnifando cocaína y practicando sexo con prostitutas. En realidad, según se desprende de los audios, habría sido el propio Villarejo el que habría ofrecido la cinta al empresario.
La intención de Muñoz, según cuenta Patricia López en Público, habría sido utilizar el citado archivo audiovisual para hacer chantaje a un exjuez, hoy abogado 'rival' a sus intereses. El empresario sevillano, según especula el citado medio, podría haber querido mejorar sus perspectivas procesales relacionadas con la batalla judicial que se abrió por su presunta utilización de facturas falsas.
Ana Rosa no ha hablado hoy sobre un tema que está provocando que Público la señale. El diario de Jaume Roures publica unos audios sobre una comida que la reina de las mañanas compartió con su marido, Eduardo Inda (tertuliano de 'El programa de Ana Rosa' y director de Okdiario) y José Manuel Villarejo.
El País intentó desactivar esos audios hace unos días al asegurar que Villarejo ofreció sus siniestros servicios a AR, pero que ella rechazó el envite. Público lleva la charla a otro estadio y asegura que ella asesoró al excomisario "mientras estaba imputado".
AR lanza un dardo
Ana Rosa Quintana ha concedido varias entrevistas en los últimos días que han aparecido hoy en prensa. La estrella catódica intenta mostrar una cara muy sencilla a los lectores de Pronto: "Soy una tía muy normal que vive en la misma casa desde hace 25 años, a la que le encanta la vida en familia, me llevo fenomenal con los míos... Creo que soy muy familiar".
La presentadora también ha hablado con El Economista, medio en el que carga contra el Gobierno y lanza un dardo contra 'Sálvame' por el 'Merlos Place': "No hay derecho que destruya a una persona por algo que ha pasado en su ambiente íntimo".
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