La campaña publicitaria más nefasta de Risto Mejide

Personaje número uno: Aparece un tal Risto Mejide y revoluciona 'Operación Triunfo' despellejando triunfitos y rompiendo audímetros con sus afilados comentarios precocinados. Lejos del intrascendente jurado de 'El Invento del siglo' o del balbuceante y apocado sujeto que apareció en su debut en 'OT', Risto se lo cree y aprovechando un sonoro divorcio entre los directivos de la cadena y los de la productora que le dio la fama, se hace un hueco en Telecinco. El malo de la película la había ganado, pero ya sin aspirantes a Bisbal de por medio se estrella en 'G20' y se tiene que buscar otro papel en su obra de teatro vital.

Personaje número dos: Vemos a un pseudointelectual colaborar con Luis del Olmo o Julia Otero, escribir artículos virales y concisos libros de autoayuda, y la tele le premia: llega 'Viajando con Chester' y se gana el aplauso casi unánime de crítica y público. Él se lo vuelve a creer y pide un aumento de sueldo, Vasile se le ríe y Antena 3 llama a su puerta. Moría el intelectual y nacía su tercer papel.

Personaje número tres: Risto se destinta las gafas, comienza a repartir almíbar por las redes sociales y se enamora de una "Lolita" llamada Laura Escanes. Pese a estrellarse en Antena 3, Telecinco le ofrece sus viejos papeles de pseudointelectual con el mismo sueldo que había rechazado en el 'Chester in Love' y una silla de malvado jurado en 'Got Talent'. Su apuesta amorosa acaba a las mil maravillas, portada del ¡Hola! mediante, y su show de entrevistas vuelve a funcionar al igual que el talent-show, pese al triunfo de "El Tekila". Viento en popa a toda vela.

Personaje número cuatro: Mediaset cree que Risto puede con todo pero 'All you need is love...o no' se despeña. En vez de ser un remake de 'Lo que necesitas es amor' acaba como un 'Deluxe' light con Bárbara Rey, David Bustamante, Antonia Dell'Atte o Ana Obregón desfilando por sin suerte por el plató. A esto se le suma una parodia de 'Homo Zapping' sobre su diferencia de edad con su mujer, un comentario de 'Late Motiv' sobre su boda y un reportaje de El Español sobre sus memes. Y ahí vemos al cuarto personaje de Mejide, el de frustrado. Vemos a un señor con el autoestima por los suelos que enfurruñado escribe ridiculeces como estas: "Vamos, Buenafuente, ríete. Que a mí no me vas a hacer daño. No a mí". Ja, ja y ja.

El mayor síntoma del daño que sufre Mejide es su carta llena de argumentos vacuos, que no son incapaces de evitar su linchamiento en Twitter. A esto se le suma que el ex de su mujer, Ferrán Reñaga, le llama "pagafantas" mientras supuestamente filtra audios de Escanes fuera de sí. Y sale a la luz el Risto acomplejado, sin la pátina intelectual de antaño por haberse apuntado al "cuñadismo" de Albert Rivera. Y entonces carga contra el periódico que recopila memes: "Hola El Español. Podríais haber usado las fotos de vuestro director, Pedro J. Ramírez. Ah, no, que no hay huevos (...) A ellos les encanta reírse (y mucho) de más parejas con diferencia de edad. A mí de los cobardes". Un señor que supuestamente es inteligente y que presuntamente sabe de publicidad no puede hacer un ridículo tan grande como el de molestarse sonoramente por unas bromas y un reportaje ligero. Él, siempre empeñado en el qué dirán, síntoma de sus admitidos complejos colegiales, debiera haberse vuelto a disfrazar de superhéroe, de malo, de cínico o de silente intelectual. Pero se decidió poner el traje de acomplejado. ¡Qué le vamos a hacer!