No hay más que ver Al rojo vivo o la Sexta Noticias para darse cuenta de las intenciones de Ferreras para convertir la Sexta en un puntal mediático de resistencia para el PSOE. Y según cuenta Hispanidad, lo hacen porque saben que con Podemos en el poder, Mediapro y compañía dejarán de ganar dinero y además el ascenso de Pablo Iglesias le conviene al PP. Así lo cuenta Eulogio López;
Si quieren ustedes saber cuál es la verdadera oposición al Gobierno Rajoy no se pierdan Al Rojo Vivo, el programa de Antonio García Ferreras. Es el que marca tendencia en La Sexta (Atresmedia) y en su gemelaCuatro, de Mediaset.
El ideólogo de la operación de nuevo liderazgo político, para convertir a Pedro Sánchez en un nuevo Felipe González, es Miguel Barroso, esposo de la ex ministra de Defensa Carme Chacón, ex secretario de Comunicación del entonces presidente Zapatero y hombre de Sir Martin Sorrell (masonería internacional o Nuevo Orden Mundial, si lo prefieren, en estado puro), el hombre de la poderosa WPP.
Pues bien, la nueva La Sexta, aunque dependiente de Planeta, apuesta ahora por Pedro Sánchez, el nuevo secretario general del PSOE, al que quieren convertir en una nuevo Felipe González y utilizan a La sexta como plataforma. Ojo, Barroso y Ferreras defendieron en su momento a Podemos como alternativa a Rajoy pero al final han optado por el secretario general del PSOE.
Se preguntarán cómo es posible que Miguel Barroso apueste por Sánchez y no por su mujer, Carme Chacón, de cuya imagen cuidó con esmero cuando se enfrentaba a Pérez Rubalcaba por el control del partido. Pues porque la opción de Chacón había quedado varada.
Otro mérito de Barroso consiste en haber unido a la campaña pro Sánchez, un líder para España, tras haberse inclinado por Podemos. Pero es que Podemos no construye, sólo destruye, y con los antisistema no se puede ganar dinero. Y a Barroso, a Ferreras y sobre todo, al jefe comercial de Ferreras, que no es José Manuel Lara sino Florentino Pérez, les gusta mucho el dinero.
Además, todo este proceso demuestra que hasta el asesor áulico de Mariano Rajoy puede acertar. Rara vez, ciertamente, Pedro Arriola no se equivocó cuando convenció al PP de que el auge de Podemos era la termita de la izquierda y sólo beneficiaba a la derecha, al PP. Así que cambiaron a Podemos por el guapo Sánchez.
Al tiempo, Barroso ha conseguido que dos divorciados se vuelvan a unir. La Sexta se creó mediante una alianza Madrid-Barcelona y unos cuantos añadidos más o menos engañados (los mexicanos de Televisa, Juan Abelló y demás compañeros inmolados por la causa). Desde Madrid, José Miguel Contreras y el propioBarroso, así como el omnipresente Antonio García Ferreras, esposo, por cierto de la periodista Ana Pastor, a la que ha metido de hoz y coz en Atresmedia, una vez que el Gobierno Rajoy le echara de RTVE. Todo ello bajo el zapaterismo.
Desde Barcelona, el socio era Mediapro, del incombustible Jaume Roures, el hombre que cuanto más entra en concurso de acreedores más trabaja y se supone, más dinero gana. Cuando La Sexta fue absorbida por Antena 3 TV, se produjo el divorcio Madrid-Barcelona. Ahora, Barroso ha logrado unirles de nuevo en la operación liderazgo, que debería llevar a Pedro Sánchez a La Moncloa, a costa de dinamitar al Gobierno Rajoy.
Y lo malo es que en Moncloa, gente avispada, como Soraya Sáenz de Santamaría, continúa pensando que Atresmedia es la empresa informativa de referencia para el Ejecutivo Rajoy.
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