Terremoto radiofónico



Prisa ha dejado de ser la reina de la radio en España. Se demostró en el ejercicio pasado, cuando las cuentas de resultados arrojaron unas pérdidas de casi ocho millones de euros. Y también ha perdido oyentes e influencia. Del dream-team que atesoraban hace una década-Iñaki por las mañanas, Gemma por las tardes, Llamas por las noches, Pepe y Paco el fin de semana, el Si amanece..., el Lo que yo te diga, Fernando Delgado en el fin de semana- queda poco o nada.

Desde entonces solo han dejado de entrar mediocres presentadores de telediarios-Francino o Pepa Bueno, con chispa radiofónica cero- y han salido casi todos los demás. El único fichaje aceptable en todos estos años fue Angels Barcelò, eclipsada en la actualidad por la maratón de fútbol. Además de algunos programas tan brillantes como menores, como El Mundo Today o Carne Cruda, que han salido por la puerta de atrás.
Y las salidas se cerraron en falso y todavía hoy no se han encontrado sustitutos de peso en programas como Hoy por hoy, La Ventana o Carrusel deportivo.

Esta crisis se ha agudizado por un pulso sin sentido con Mediaset, tras el entendible enfado de Sainz con Vasile por las ausencias de Manu Carreño, más pendiente de la televisión que de la radio.
Jesús Gallego, que comenzó como joven promesa gracias a su labor en el micrófono siguiendo al Real Madrid y luego pasó a un segundo plano en SER deportivos, ha madurado a las mil maravillas tal y como ha demostrado en el programa local y en Deportes Cuatro 2, labor que abandonará la próxima temporada para centrarse en el Carrusel deportivo, convirtiéndose en el cuarto director del programa en cuatro años. No estará a su lado Ponseti, que no convencía en la labor a nadie, pero sí podrían seguir Dani Garrido y Juanma Ortega.

Las radios musicales de Prisa

En las radios musicales el tema no está mucho mejor. Los 40 Principales se han dejado 600.000 oyentes en un solo año, y el liderato de las mañanas se encuentra ya en peligro.
Las primeras consecuencias no han tardado en llegar; Xavi Rodríguez queda fuera del Anda ya!, programa que está marcando mínimos de audiencia, teniéndose que centrar el catalán en intentar aguantar en Todo va bien, programa que no puede ni con los refritos de Motos y Wyoming.
Le sustituirá, tal y como avanzan nuestros amigos de Megatele, Dani Moreno, que comandaba desde hace más de una década El Gallo máximo en Máxima FM, la radio dance de Prisa.

El favorito para hacerlo era Xavi Martínez, fichaje estrella para el próximo otoño, que quizás relevará al mítico Tony Aguilar en la radiofórmula de la tarde o a Yu; no te pierdas nada, que podría dejar de emitirse tras sus mediocres resultados y tras el probable adiós de Vodafone, su patrocinador principal.
Recordemos que hace un par de años Xavi y Tony, emblema de la casa desde hace dos décadas, mantuvieron una guerra musical en Twitter. No es el primero que descalifica a Los 40 y luego aterriza allí, tal y como han demostrado esta temporada Uri Sàbat y Daniela Blume, cuyo lema en su anterior cadena era "aquí los principales sois vosotros".
Martínez se ha convertido en una de las revelaciones de la radio musical en los últimos años, al resucitar el fenómeno fan conectado con las redes sociales, tanto en Euroclub como en Megastar FM, cadena donde él era la estrella fundacional y hacía doblete, logrando muy buenos resultados.

La guerra entre Mediaset y Prisa también ha dejado huella en Cadena Dial, donde Mar Montoro se ha visto obligada a decir adiós de Prisa Radio tras 22 años porque no le dejaban compatibilizar su labor de copresentadora en Atrévete-se esperaba más de Cantizano- con su puesto de asesora en Mujeres y hombres y viceversa. Montoro podría tener cara a la próxima temporada o proyectos en la radio, tal y como ella ha avanzado, o algún programa en Mediaset. Si no sería complicado entender la decisión.
Mar sigue los pasos de Frank Blanco o Manu Carreño, que en los últimos tiempos han preferido la caja tonta a la radio que les vio crecer.

Si hay cambios en Los 40 y en Dial, también los habrá en Radiolé, que pierde media docena de locutores tras la imposición de Prisa a producir todos los programas de la emisora "lolailo" en Sevilla, provincia donde la cadena logra mejor resultado del país. Y los debería haber en M80, cadena que parece que están dejando morir con Sergi Mas haciendo un experimento insípido que dista mucho de sus geniales trabajos anteriores en el medio.

Tranquilidad en COPE, con tambores de estrella viniente 

En COPE parece que se respira una apacible tranquilidad, con los directivos más pendientes del guerracivilismo de 13 TV, cadena que sigue en pérdidas. Algunas informaciones dicen que las altas esferas eclesiales han exigido un cambio radical en cuanto al mensaje, que debiera ser más cristiano y menos pepero. Pero otras dicen que todo seguirá igual hasta que el Gobierno, que disfruta de esta cadena como lo hace de La Razón, les regale una licencia de TDT que logre salvar las cuentas.

En COPE por ahora siguen los cambios apacibles, capitaneados por la eficaz y dañina para la radio consultora sueca Radio Intelligence. Buruaga, quizás convencido por una oferta de Génova en RTVE, dijo que no aguantaba más que le dictaran y le orientaran hacia una radio aséptica, dijo adiós un año antes de que le dieran la patada.
Ángel Expósito, heredero en carrera veleta de Ónega, tomará su lugar y ya ha demostrado en la primera entrevista que seguirá los dictados de los suecos; "Hay un exceso de política en la radio". Es decir, lo que llevan diciendo los suecos los últimos tres años. Es extraño que él diga eso cuando no ha hecho otra cosa en su vida que hablar de política. Podría estar al frente de las mañanas solo un año, como relevo interino hasta que llegue Carlos Herrera, del que dicen que quiere largarse de Onda Cero por la política transversal de Lara de apoyar a La Razón y a la Sexta y no estar loco. Los curas sí quieren pujar por el andaluz deberán desempolvar la chequera, ya que la estrella trinca seis millones de euros anuales por hacer de maestro de ceremonias.
Quizás volvemos a la COPE de antaño, con estrellas millonarias fichadas de la competencia tipo Luis del Olmo o García, o populistas creados en la casa como Encarna o Federico.

Ramón García, que sigue las tesis suecas al dictado, ha tenido su recompensa con unos buenos resultados en el último EGM y con la renovación para las dos próximas temporadas. También seguirá Colmenarejo, que convence a todos en la casa, y los de los deportes, a los que les queda un año de contrato, pero de los que nadie duda que obtendrán una renovación al alza, pese a la imposibilidad de alcanzar el liderazgo en oyentes, que sí en facturación.

Las musicales de la casa siguen viento en popa; la Cadena 100 con Javi Nieves más consolidado que nunca, Rock FM, que ha frenado en su espectacular crecimiento, y Megastar FM, del que ya deben estar preparándole un sustituto a Xavi Martínez, que era el alma de la emisora.

Onda Cero; donde todo sigue igual

Ferrari sigue capitaneando los cambios tranquilos, que le están siendo efectivos a la cuenta de resultados de su jefe, José Manuel Lara.
La principal intranquilidad es el tema de la renovación de Herrera, pero ya está Alsina como futurible, porque éste se quedó con las ganas de coger el toro matinal cuando estuvo a punto de fichar por Punto Radio.
A Julia Otero le quedan dos años más de contrato, y a Isabel Gemio tres, porque acaba de renovar. En los deportes también se impone la continuidad, aunque algunos nos sigamos sin explicar como Ferrari no quiso pujar por Paco González y su equipo, que parecía el único método cuerdo para obtener en un plazo medio el liderato absoluto. Quizás es más rentable su plan. No sé.

También funciona a las mil maravillas Javier Cárdenas por las mañanas, que acaba de batir su record histórico y apunta cada vez más alto. El Jiménez Losantos de la radio musical acaba de lograr que le renueven ni más ni menos que cuatro años el contrato. Casi ná.
Cárdenas seguirá acompañado de programas como Euroclub o Ponte a prueba, que han mantenido resultados pese a la fuga de estrellas y la promoción de hombres de la casa.
Melodía FM por su parte tendrá que seguir ganando emisoras para consolidarse, con Nuria Roca como estrella del pastel matinal.

Los otros

RNE sigue con el perfil bajo que parece que impuso el PP. Ni la propaganda de antaño con Antonio Jiménez ni la pluralidad de la etapa ZP. Perfil bajo y veto a Podemos, eso es lo que parece que suena en RNE, con Alfredo Menéndez haciendo una radio previsible en la mañana y el Ciudadano García sorprendiendo gratamente por las tardes.
En esRadio parece que seguirá la continuidad, tras la fuga la pasada temporada de César Vidal. Sorprende en el sector que la cadena no avance en oyentes pese a la mejora en cuanto a cobertura.

Radio Marca por su parte sigue estancada en el medio millón de oyentes, gracias a la radio antigua impuesta por García Caridad. Ni con el acuerdo con esRadio para el fin de semana han conseguido mejorar resultados.

Blas Herrero por su parte apuntala los oyentes de Kiss FM y Hit FM, pero ambas se mantienen igual. Parece cada vez más difícil el sueño del empresario asturiano de conseguir un multimedia de renombre.

Las radios económicas por su parte dan bastante pena, al sacar a relucir supuestos liderazgos en esta temática con 30.000 oyentes diarios. Gestiona Radio sigue sin aparecer casi en el EGM-Segalés deja la mañana diaria para relevar a Goyo González en el fin de semana- e Intereconomía, que es cada vez más residual tras dejar de pagar postes en alquiler.

En las autonómicas, Bastè conserva el liderazgo al frente del matinal de RAC 1, y ha renovado solo un año tras los intensos rumores de adiós. No tendrá ya como rival menor a Toni Marín, que abandona las mañanas de la pública Radio 4 tras ocho años.

Mientras que Ely del Valle intentará colocar en el mapa a Onda Madrid, que sigue marcando audiencias más propias de una emisora municipal de provincias.
Por su parte Pedro Javier Cáceres, mítico creador de El Albero en COPE y después presentador en Radio Intereconomía y colaborador con Carlos Hererera, ha fichado por la radio pública manchega para hacerse cargo de Tiempo de fiesta, una especie de carrusel taurino en la tarde del domingo, similar al de la radio andaluza, que compaginará con La Puntilla, espacio de la tele manchega.

















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