Tenemos un pájaro como jefe de Estado que aprovecha hasta el día de su mensaje de abdicación para mandarle "mensajitos" a su amante. Asi lo hizo, según cuenta LOC, con la aparición en su despacho de un frutero que cuesta ni más ni menos que 3.000 eurazos. Y parece ser que el frutero se lo regaló Corinna, su amante de la última década-antes pasaron por la cama del pirata Bárbara Rey, Paloma San Basilio, Marta Gayá o Sara Montiel-. Así lo cuenta el suplemento rosa de El Mundo;
Viernes 18 de febrero de 2011. En El Mata, uno de los exclusivos chalets de Gstaad (Suiza), el pueblo donde los ricos de verdad se concentran para esquiar, se expone una nueva colección de la princesa Ira von Fürstenberg, artista y ex mujer del fallecido Alfonso de Hohenlohe, el hombre que un día se inventó Marbella.
Al acto de la presentación de 'Objetos Únicos' (nombre de la citada colección homenaje a los animales de África, continente que adora Ira) asisten más de doscientos invitados, entre los que se encuentra una amplia representación de la aristocracia europea. Entre baronesas, príncipes, princesas y millonarias de todo el mundo, destaca la presencia de Corinna zu Sayn Wittgenstein, la amiga de Su Majestad.
El frutero llevaba incrustado un trébol de cuatro hojas para atraer la buena suerte.
Según ha podido saber LOC por fuentes presenciales de aquella jornada, la alemana adquirió uno de los fruteros de la colección de roca con esmalte que lleva incrustado un trébol de cuatro hojas de jade, que en la simbología china se utiliza como amuleto para atraer la buena suerte. Esta pieza es justo la que aparecía en la mesa del despacho del monarca el día que anunció su abdicación.
Ira von Fürstenberg reconoce que la obra es suya. "Estoy muy contenta, porque esa foto es un momento histórico. Cuando me lo compraron, me dijeron que se lo iban a regalar al Rey de España, pero nunca me lo creí. ¡Hasta que lo vi! Esto sí que es un orgullo para mí, aunque he de confesar que estoy muy afectada con su abdicación y todo lo que está pasando", declara con la cercanía de una princesa accesible.
Ira, ex actriz y miembro habitual en los veranos marbellíes, guarda discreción ante la insistencia para que revele si Corinna fue la que compró o no esta pieza. "Lo más importante es que guste a la gente. Me compran objetos y los regalan, pero nunca sé para quién. Una princesa de Luxemburgo me comentó esta semana que tenía dos copas mías de jade en su mesa de comedor y que le encantaban. Lo relevante no es quién lo compra y a quién lo regala, sino que nadie hace lo que hago yo y a mí me divierte hacer algo tan especial", responde evasiva, pero entre risas.
Ira von Fürstenberg vende sus piezas exclusivas por todo el mundo
El precio del frutero que Don Juan Carlos tenía en su mesa el día que se anunció la abdicación en favor de su hijo es de 3.000 euros. "Esa jarrita de cuadrifolio que trae suerte debe ser de las piezas más económicas. También había un marco de la misma colección, pero a él no se lo vi", recuerda una de las fundadoras de la célebre jet-set marbellí.
Ira von Fürstenberg no conoce casi al Rey y nunca se ha encontrado con el futuro Felipe VI. "Con Don Juan Carlos coincidí alguna vez cuando era joven en América. Con el Príncipe nunca. Es normal, yo no he vivido en España, por lo que nunca ha surgido. Se le ve un hombre fuerte y maravilloso. Igual ahora se siente aliviado. No sé...".
El rey saliente lo tuvo claro a la hora de elegir las fotografías que colocaría como telón de fondo en el vídeo de su abdicación. Por un lado, una imagen junto al príncipe Felipe y la infanta Leonor. A su lado, una con su padre, el conde de Barcelona. Al igual ocurrió con los objetos de la mesa. Tanto los cocodrilos de plata como esta pieza de cristal no habían tenido protagonismo hasta la fecha. Pero decidió darles visibilidad en un día tan importante para la Historia de España. El motivo sólo él lo sabe.
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