Carroña nocturna




Aparece todas las noches en nuestro televisor. Es Sandro Rey, negro pájaro de la televisión corrupta y afamado vidente de la degradante y supuestamente progresista la Sexta. Él y otros sinvergüenzas se aprovechan de la ignorancia, de la desesperación, de la incultura y de los duros momentos entre soledad y la desgracia de señoras de la tercera edad. Además, este verdulero de nariz puntiaguda y de rostro afilado-en otros casos producido por el consumo de sustancias- y de pelo negro y lacio-una de esas personas con las que cruzarías la acera antes de pasar a su lado-, se ha convertido en una "superstar" de la telebasura y de hecho esta primavera le veremos en la segunda edición de ¡Mira quién salta!

Euro y medio por minuto cuesta que este sujeto te cuente sus impresiones sacadas de un manual barato de psicología. Sandro y Astro TV-la empresa que produce esta estafa lamentable- cuenta con la complicidad de la Sexta, cadena que arrenda la franja de madrugada por miles de euros, de Telefónica, que se lleva la mitad del "botín", y del Estado, que mira para otro lado con esta miseria moral. Como no se atreven a prohibir este tipo de basura-ya que la Iglesia católica caería detrás por las mismas razones-, el único remedio que han lanzado en cuanto a legalidad ha sido el de prohibir que a un señor le tengan más de media hora a la espera pagando.

Otras estafas similares en la madrugada son los bingos, que cuentan hasta con la banderita de España, que quiere decir que el Estado aprueba y trinca por este tipo de "teletimos". Tiempo atrás estuvieron de moda los concursos donde te preguntaban, "El que se fue a Sevilla perdió su...".
La pasividad del Estado propició que estafadores como la familia Del Campo, se embolsara más de 60.000 euros diarios por prometer premios que no entregaba en el famoso caso Telesierra. La estafa duró entre el año 95 y 2004, cuando el patriarca ingresó en prisión.

En este vídeo comprobamos algunas de las grandes mentiras de Sandro Rey, destapadas desde el programa El Intermedio;




1 comentario:

  1. Pooooooobres señoras de la tercera edad a quienes este abyecto personaje obliga a llamar y a creer todas las sandeces que dice.

    No cuela ya ANARCOMACHO

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