Carlos Pecker, realizador de Punto Pelota hasta este jueves, ha contado en primera persona como después de votar como un trabajador más la convocatoria de huelga en Intereconomía TV, ha sido testigo en primera persona de la prohibición de la cadena a los trabajadores del programa deportivo para acceder a los estudios;
Acabo de vivir uno de los momentos más decepcionantes de mi vida: han echado a Josep Pedrerol de Punto Pelota y a todo su equipo sin previo aviso.
Cuando nos habíamos reunido la mayoría de la plantilla para votar si ir o no a la huelga, me dicen que Josep ya no presenta el programa deportivo líder de audiencia y que le han sustituido por Carlos G. Hirchfeld.
Al salir de la abrumadora votación me encuentro a los redactores del programa en la calle, porque les habían prohibido el paso a las instalaciones. Estábamos todos alucinando y sin entender nada.
Al cabo del rato subo a la T-4, como llamamos a la caracola de Punto Pelota, y encuentro tan solo al productor, al editor y a tres becarios, los demás eran de la productora de Pedrerol.
Cuando me dice Javi Casado, el productor, que nos reunamos para ver qué ocurre con el programa de esta noche, aparecen los jefes y me comentan que ya estoy fuera del programa, que me vaya a mi ordenador y que cuando arranque la emisión de Punto Pelota me vuelva a mi casa.
Cuando ya creía haber visto todo me avisan para decirme que Pedrerol está entrando escoltado por la Policía. Incrédulo salgo hacia la T-4 y ahí está Josep hablando con representantes de la casa que le prohíben el paso.
Con el tiempo, y después de los típicos papeleos con la "poli", Pedre sale de las instalaciones y en la calle se abraza con Siro, Quim, Irene, sus pupilos y un grupo de fans 'peloteros' que le abrazan y le animan a seguir hacia adelante.
Mira que llevo tiempo en la tele y he visto de todo, pero hoy se han superado.
Pedre, estamos todos contigo incondicionalmente y seguirás siendo un ejemplo por tu genialidad, profesionalidad, implicación y entrega al trabajo. Seguro que en breve te volvemos a ver en la pequeña pantalla que tu has hecho gigante para todos nosotros.
¿Tan mal está todo Carlos que peloteas a un tipo despreciable con el que has tenido broncas inimaginables?
ResponderEliminarPecker, como buen hijo de quien es, aprendió que los "buenos ciudadanos" son los que muestran un respeto reverencial hacia los poderosos pero se muestran muy fuertes con los débiles.
ResponderEliminarPecker, otro que va de víctima y "se olvida" de cómo trata él a sus subordinados.
¿Sabes, Carlitos, cuantas veces fue Pedrerol a pedirle tu cabeza a Ariza? Dormirás más tranquilo si no lo sabes.
"HORROROSO" define este hijo de papá, poco acostumbrado al hambre, que su "amigo" Pedrerol (alguien que pidió su cabeza en reiteradas ocasiones) acudiera escoltado por la policía muncipal de Pozuelo. Por supuesto, Carlitos, por supuesto. Eso sí es "horroroso" y no lo que le está ocurriendo a muchos de los que te cruzas a diario: gente que ha perdido su casa, que ha tenido que volver a casa de sus padres a vivir de la pensión, gente que el día 20 de cada mes deja de cenar porque si no, no pueden pagar el abono tranporstes para ir a trabajar a UNA EMPRESA QUE NO LES PAGA POR SU TRABAJO. ¿Sabes, Carlos, que bajo el puente de la mútua, antes de que os desahuciaran de Castellana, dormían varios de tus compañeros porque ya no tenían adonde ir? ¿Sabes, Carlos, que muchos de tus compañeros aprovechan sus ratos libres para ir a "Cáritas" a comer o a recoger comida para sus niños?
ResponderEliminarPero lo "horroroso" es lo que le pasó a un privilegiado e insolidario que jamás aceptó rebajarse un euro su sueldo a pesar de la miseria en la que viviían muchos de los que trabajaban con él.
"Horroroso", es que los hijos de los que vivieron a todo trapo durante la dictadura sólo hagan causa común con los de su condición y clase. AL fin y al cabo, ya lo dijo esa insigne intelectual llamada Carmen Lomana, "lo realmente duro es que la gente que lo ha tenido todo ya no tenga dinero 'cash' porque el pobre está acostumbrado y no le pasa nada".