Mariló y el toro de la Vega

Nunca deja de sorprendernos Mariló. Tras conseguir hundir las mañanas de la pública, decirnos que el alma está en los órganos, insultar a las fiestas de San Fermín, humillar en directo a una colega y conseguir el despido de cualquiera que le haga sombra en su equipo, ahora destaca como promocionadora de espectáculos infames, lamentables y salvajes como es el toro de la Vega.

Sus superiores han tolerado su asquerosa actuación en la famosa mañana con la reiterada "liberad de expresión". No se puede utilizar la libertad de expresión para emitir este aquelarre infame y violento que nos devuelve a los años oscuros de la España profunda.

"Es una fiesta maravillosa" decía esta sujeta fallona y enchufada. Una fiesta maravillosa sería ver a una turba de analfabetos armados con lanzas punzando el cuerpo de alguna pájara que yo me sé.

"Ahora mismo nadie se ha acercado al animal, nadie le ha agredido, nadie le ha pegado y se está convirtiendo en un encierro en el que los mozos están acompañando al animal", decía minutos antes de que el animal muriese por una banda de tarados que basándose en una tradición infame matan salvajemente a un pobre toro indefenso. Es de juzgado de guardia que tengamos una cadena pública que promociona y se gasta el dinero en este tipo de actos asquerosos hechos para mentes enfermas. Este es un acto hijoputesco que debería costarle el cargo a esta fracasada que está hundiendo con sus actos la cadena pública. Carlos Herrera ya le ha echado un capote y ha salido en su defensa. Estará orgulloso de la madre de sus hijos.