La política que está llevando a cabo Mediaset en cuento a ficción resulta incomprensible desde el prisma de la lógica. Si Paolo Vasile sufrió los años en el desierto de Telecinco en cuanto a ficción intentando con una importante inversión económica que finalmente ha dado sus frutos, ahora la cadena está dilapidando algunos de sus proyectos que habían logrado encauzarse.
Mediaset ya cerró Aída por sorpresa y canceló a última hora la segunda temporada de su sucesora, Anclados, que había cerrado su primera temporada con un prometedor 18,9% de share. Pero lo que han hecho con Chiringuito de Pepe, que cerró su primera temporada con un estupendo 21,2%, ha sido de traca.
Y es que tras retrasar su rentré durante varios meses, la cadena presentó ayer su segunda temporada, que contará con dieciséis capítulos en los que aterrizarán Dani Martínez y Karra Elejalde, anunciando que no habrá tercera tanda. Esta noticia sumada al final decidido de El Príncipe, que se supone que cerrará sus emisiones esta primavera, promete un futuro sombrío para el departamento de ficción de la cadena, que este otoño ha cerrado B&B por la puerta de atrás y ha estrenado en Cuatro Rabia, que no tendrá por supuesto segunda temporada tras cerrar sus emisiones en la madrugada rondando el 5% de share.
¿Qué bazas le quedan vivas a Mediaset a día de hoy? Pues La que se avecina, que vuelve con nuevas tramas y caras esta primavera, Sé quién eres, que ya está siendo promocionada, y La Verdad, sustituta de El Príncipe. Por lo tanto podemos barruntar que Paolo Vasile apuesta a las claras por el corazón, el reality y el talent show como géneros predominantes.
Y luego quieren que nos enganchemos a las series españolas, hace años que las dejé de ver, así como su seguimiento en "nuestras cadenas"que las tratan con tanto respeto (el mismo que le tienen a su audiencia), cambiando la emisión de día y en cuanto les falta share... hala, a tomar por culo a la madrugada y posterior cancelación. Bye, bye Mediaset, Atresmedia y TVE.
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