El lamparón sectario de Podemos en Catalunya

La puesta de largo de Podemos en Catalunya no ha podido ser mejor. El partido ha demostrado que ha recobrado impulso tras su tropezón mediático de hace un mes. El único punto oscuro de la formación que lidera Iglesias fue que el acto central del partido lo presentó Gemma Galdón, una pájara que en su época como tertuliana del Canal Català se negó a montarse en el coche de un taxista porque llevaba la bandera española. El Canal Catalá, cuyo propietario, Nicola Pedrazzoli, ha jugado en el campo político con varias barajas-la del PSC en Catalunya, la del PP en Andalucía con Arenas o la del PP de Badalona en la actualidad-, tomó la miserable decisión de despedir al chófer. Con dos cojones.

Podemos a partir de ahora debe cuidar sus filias y fobias a su alrededor. En las fobias se encuentra Pilar Rahola, escriba nacionalista, que ha linchado a Iglesias vía Twitter. Que una señora de ese calibre se meta con Podemos es todo un premio para la formación. Pero entre las filias que despierta, se ha sumado Luis María Anson, que ha escrito en El Mundo que "el éxito de Podemos se debe sustancialmente a la inteligencia de su líder, Pablo Iglesias. Cuando habla en público, cuando maneja las redes sociales, cuando se expresa ante las cámaras de televisión, cuando debate en las tertulias, contrasta con la inmensa mayoría de los políticos que balbucean, reiteran los mismos argumentos, se repiten y aturullan. Iglesias, al margen de que se coincida o se discrepe de lo que dice, expone sus ideas con claridad, es conciso en la expresión, contenido en los ademanes, convincente con la mirada". Algo mal está haciendo Iglesias para que este pájaro conservador se arrime al ascua.