Fortu cuenta su calvario personal que le evitó ir a Supervivientes



Fortu Sánchez, cantante de la mítica banda Obús, entró en el mundo televisivo cuando su hija Adriana concursó en GH12+1'. Poco después, el heavy paticipó en 'Mira Quién salta!, convirtiéndose en uno de los participantes más queridos de la primera edición del programa de saltos. Puesto que tiene tirón mediático, estaba previsto que Fortu formase parte del casting de 'SV2014' pero poco antes de viajar a Honduras su vida se torció de manera dramática y, por qué no decirlo, escatológica.











He pasado un infierno y muchísimo sufrimiento después de someterme a una operación. Han sido unos meses horrorosos que no se los deseo a nadie.



Así de contundente se muestra Fortu en la entrevista que le ha concedido a Kiko Hernández y que el colaborador colgó, el pasado 4 de junio de 2014, en su blog de Telecinco.es- Fortu: "He vivido un infierno, incluso pensé en suicidarme"-.
y es que, según narra el cantante, todo comenzó cuando:


Firmé el precontrato de Magnolia para ir a Supervivientes hace ya 5 meses. Hice un concierto en Oviedo y una pequeña hemorroide que tenía comenzó a sangrarme. Sabía que así no podía irme a la isla, así que me fui a una clínica privada y me puse en manos de un cirujano.

Fortu confiesa que, efectivamente, la única razón por la que pasó por el quirófano fue poder ir al concurso de supervivencia:


Si no yo no me habría operado porque no era una cosa grave, pero yo quería ir a la isla para darlo todo y llegar allí y ponerme a sangrar.

El problema es que la operación no fue como se esperaba:


Salió mal. Como resultado de la operación de "ese carnicero" me salió una fisura anal, una fístula, y otra hemorroide exterior que era un bulto gigante. ¡Han sido 5 meses de auténtico infierno!

El cirujano me dijo que era una inflamación provocada por una infección y que, con el tiempo, se me quedaría ahí un pellejito que si estéticamente no me gustaba me lo podría quitar.

Me dijo que había tenido mala suerte y que debía tener paciencia. Pero Kiko, imagínate lo que es vivir durante 5 meses, las 24 horas del día con un dolor insoportable

El exconcursante de '¡MQS! también da detalles escatológicos y desagradables sobre cómo vivió su día a día tras la operación:


Esa zona es muy delicada, toda la porquería y todos los gérmenes pasan por ahí y puedes pillar infecciones. Perdí peso porque sólo podía estar a base de comida light porque tenía que tener mucho cuidado de no coger estreñimiento.

Además, mis necesidades tenía que hacerlas en una ducha porque tenía que estimularme el ano con agua caliente para que pudiera abrirse. Me da hasta vergüenza contarlo, pero eso ha sido mi día a día durante todos estos meses... Ha sido todo muy fuerte y muy desagradable.

Tenía una gira por Norteamérica y tuve que aplazarla. Para mí era imposible aguantar las horas de viaje a Colombia o Ecuador. Y, para los conciertos que he hecho durante estos meses, no podía viajar sentado, tenía que hacerme todas las horas de viaje tumbado o de lado. Además, siempre tenía que buscar hoteles que tuvieran manguera de ducha, porque si no, lo pasaba fatal. Incluso lo he tenido que hacer en un lavabo, lavándome como he podido... Ha sido muy heavy.

Y tal y como él mismo confirma, el dolor no fue sólo físico:


Psicológicamente estaba perdido y destrozado. Había días que me quería tirar por la ventana, me quería suicidar... Te lo juro que lo he pensado. Era insoportable el dolor que pasaba todos los días, y el pensar "mañana otra vez lo mismo" me hundía muchísimo.

He llorado muchísimo en el silencio de mi casa y he maldecido cien mil veces el momento en el que decidí operarme. De verdad Kiko, la gente se echará las manos a la cabeza, pero se me iba la vida por el ano... Me miraba al espejo y me veía cara enfermo, tenía la mirada triste y la cara caída.

No sé si fue mala suerte, si fue un accidente, o el resultado de una negligencia médica. Eso lo tendrá que decidir un juez porque el caso ya está denunciado.

Pero ¿cómo pudo salir Fortu de esa pesadilla? Él mismo le confiesa a Kiko Hernández que:


Pedí una segunda opinión a un equipo de cirujanos expertos en ese tipo de intervenciones, y me dijeron que el que me había operado había sido un salvaje por hacerme ese tipo de intervención ya que la hemorroide que yo tenía era de Grado 2, vamos, una pequeña. Que lo que me hizo era una salvajada y que la operación nueva que me planteaba era una salvajada aún mayor, que me quería rematar. Vamos, ¡si me hubiera vuelto a poner en sus manos me habría destrozado la vida por completo! Incluso luego me he enterado que el primero que me operó no era esa su especialidad...

Me volví a operar con este equipo de cirujanos especialistas ¡y me ha cambiado la vida! Me operé hace 3 semanas y aún estoy con las cosas típicas del postoperatorio, pero como me he tirado tantos meses con ese dolor tan salvaje, yo creo que mi cuerpo y mi mente se han habituado al sufrimiento, y el pequeño dolor que tengo después de la segunda intervención no me parece nada. Es mucho más llevadero, aunque todavía tenga ir con una gasa porque me supura, no es nada comparable con lo que he pasado durante tantos meses.

Y para colmo, el cantante también ha sufrido económicamente:


Me he gastado 6.000 euros porque he tenido que someterme a dos operaciones en dos clínicas distintas. Y aprovecho tu blog para aconsejar a todo el mundo que tenga mucho cuidado en manos de quien se pone, un carpintero no te puede hacer un coche, porque mirad lo que me ha sucedido a mí... ¡Nunca os fiéis de nadie!

Y como decíamos, todo ha sido por sus ganas de ir a SV2014. ¿Hubiese sido un gran concursante? Él cree que sí:


Me he quedado con muchísimas ganas de ir y demostrar lo que soy y el juego que podía haber dado. Soy muy aventurero y muy superviviente y me hizo mucha ilusión cuando me dijeron que me iría para Honduras. Luego, dos meses después de operarme me dijeron que no iba, y menos mal, me hicieron un favor, porque en esas condiciones me hubieran echado para atrás, no habría aguantado ni las horas de vuelo. Me encantan este tipo de realities así que ¡espero y deseo que para la próxima edición cuenten conmigo!

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