El Real Madrid consiguió anoche su cuarto pase consecutivo a las semifinales de la Champions, hecho solo logrado en una ocasión más en la historia del conjunto blanco. Pero ayer los madridistas se fueron enfadados a la cama por la penosa actuación de su equipo, que se mereció por instantes la eliminación. Este equipo sigue sin funcionar en las grandes noches y ayer estuvo a punto de pagarlo caro. El Borussia agrandó la maldición del Madrid en Alemania y con éste son cinco "bailes" de Klopp en seis partidos-y en apenas dos años-. Anoche a punto estuvieron de una heroicidad que finalmente no llegó, provocada en gran parte por la mediocridad de un equipo que hizo aguas en todas las líneas, incluido el centro del campo-pese al trivotazo inicial de "Carletto"-. El Madrid se empeñó en sacar el balón por el centro y a base de balonazos que recibían los mediocampistas de espaldas. Justo el "mal" del año pasado.
Pero a punto estuvo también de no haber película, ya que Di María erró un penalti en el 16-tras resbalarse-. La parada de Weindelfeller encendió a los aficionados del Signal Iduna Park, que llevó a su equipo en volandas, mientras que el rival se moría de miedo ante tamaño ridículo.
La primera parte fue un baño alemán que se materializó tras dos errores de Pepe-en una corta cesión de cabeza a Casillas- y de Illarra-tras una mala entrega de Ramos-. Ambos los llevó a la red Reus, que pudo relevar anoche a Lewandowski como héroe local. Los alemanes se fueron a las duchas como ganadores y los madridistas con cara de debacle. En la primera parte no aprobó nadie; Xabi Alonso, que sigue para el desguace, Illarra, que sigue sin nivel para las grandes citas, Benzemá, que sigue cabreando al aficionado con su insolencia, Modric, que se estrenó como sorprendente fábrica de perder balones, Casillas, tras su mala salida en el primero, Pepe y Ramos con un gol atribuible a cada uno... Y Cristiano protestando en el banquillo. Muy mal debe estar el astro luso para que Ancelotti no le diera minutos anoche.
En la segunda parte mejoró el conjunto blanco, pero volvió a verse superado por su rival, que metió al conjunto blanco en su área. El Madrid salvó los muebles anoche por dos paradas de Casillas-una de ellas de mucho mérito- y por la flor del portero, que vio como Mhkitaryan le regateaba y posteriormente mandaba a puerta vacía un balón al poste. ¿Lo desvió "El Santo" con la mirada? Antes que eso, el decadente Xabi Alonso debía haber sido expulsado por doble amarilla, por lo que los aficionados radicales blancos hoy callarán sobre arbitrajes. Bale y Benzemá pudieron sentenciar con dos ocasiones para cada uno, pero hay que recordar que el equipo alemán estaba volcado y atrás dejaba muchos espacios.
Al Madrid le valieron finalmente las rentas de la ida para meterse entre los cuatro mejores de Europa, aunque anoche no mereció esa consideración. El suspiro blanco llegó con el pitido final y ahora el conjunto blanco espera un sorteo donde estarán Atlético o Barça, que esta noche romperan la igualdad reintante entre ambos.
Mucho mérito el del Borussia con un equipo inferior al del año pasado fue capaz de poner al madrid contra las cuerdas, esa gente tiene mucho orgullo. El madrid por su parte salvó un momento crítico y es eso precisamente lo que lo puede llevar a hacerlo campeón (para mi desgracia), pero verte casi fuera y sobrevivir fortalece mucho.
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